Abordar por primera vez el aprendizaje para ir al baño puede llegar a ser como escalar el Everest. No tienes idea de cómo será la experiencia hasta que la hayas terminado. Por suerte, el entrenamiento es mucho más fácil que escalar el Everest pero cuando lo finalizas, sientes como si hubieses alcanzado una meta de esa magnitud.
Personaliza tu plan
Así como no emprenderías una expedición de alpinismo sin un plan, no deberías comenzar con el aprendizaje para ir al baño sin un plan. Habrás alcanzado la mitad de tu objetivo si sabes hacia dónde vas y cómo hacerlo. Crear un plan de aprendizaje para ir al baño no tiene por qué ser una tarea difícil o compleja, pero sí tiene que adaptarse a las necesidades de tu familia, principios y estilo de crianza.
Janet Cole, madre de tres niños que vive en Mt. Angel, Ore., creó un plan de entrenamiento teniendo en cuenta sus valores y las personalidades de sus niños. Investigó, encontró el método que le gustaba y lo aplicó. Siguió el plan al pie de la letra, incluso cuando no veía resultados inmediatos, porque este se adaptaba a su filosofía de crianza.
La Dra. Ari Brown, escritora y pediatra en el Capital Pediatric Group en Austin, Texas, cree que tener un plan significa tener la mitad del objetivo cumplido.
"Es importante tener un plan para este entrenamiento así no tienes que andar con vueltas a la hora de quitarle los pañales a tu niño", aconseja la Dra. Brown. "Si caes en eso, lo único que sentirás es frustración y tu niño sentirá que fracasó".
Comenzando
Jeremy G. Schneider es un terapeuta familiar y de parejas que se especializa en temas de crianza. Él cree que elegir un enfoque para el entrenamiento puede ayudar a garantizar el éxito del mismo. También cree que es importante que te tomes tu tiempo para pensar con tranquilidad mientras diseñas el plan.
"No creo en la filosofía de que debes entrenar a tu niño para que aprenda a ir al baño en una determinada fecha o periodo de tiempo", comenta Schneider. "¡Es mucha presión! Sin embargo, un buen enfoque puede tener el efecto adecuado, especialmente si empiezas a presentarle a tu niño la idea de que aprenda a usar el orinalito de varias maneras".
Schneider cree que un buen plan siempre debería comenzar con la evaluación del interés del niño. Si el niño no está interesado, ni toda la planificación del mundo tendrá sentido.
"Creo que un buen enfoque comienza cuando le presentas la idea, hablas sobre ello cuando le cambias los pañales, lo invitas a que te vea usar el inodoro, le compras libros y vídeos sobre orinalitos, le compras un orinalito y se lo haces más accesible", dice Schneider. "Si está preparado, lo intentará. Si no está preparado, no lo hará. Y obligarlo podría generar rechazo y enfrentamientos, provocando en ambos gran frustración. Asume el rol principal y verás que será una experiencia mucho más placentera".
Bueno, supones que tu niño está preparado y ya has pensado sobre el estilo de crianza. ¿Cuál es el siguiente paso? Investigar un poco. Los sitios web, tu proveedor de cuidados médicos, otros padres y las librerías son posibles recursos para encontrar información adecuada para tu familia.
Tener todo lo necesario
En esta etapa, sería una buena idea volcar tu ideas en una computadora portátil. Un diario puede servir para registrar los momentos más importantes del plan de aprendizaje para ir al baño y una lista de los productos que necesitarás.
Entre los artículos más obvios se encuentra el orinalito, los Calzoncitos entrenadores Pull-Ups®, ropita interior y cualquier otra cosa necesaria para el método que utilices. ¡Y no te olvides de las cosas que entretienen a tu niño mientras está sentado en el orinalito! Las cosas que debes tener a mano son libros, juguetes pequeños y pegatinas.
"Los padres deberían estar preparados con mucho material de lectura", dice Schneider. "Los niños tardan bastante a la hora de usar el orinalito y es probable que tengas que quedarte al lado de tu niño por un buen rato mientras usa el orinalito o el inodoro. De hecho, creo que este es uno de los beneficios del proceso de entrenamiento: mi relación con mis niños se fortaleció por el tiempo que pasábamos juntos, uno al lado del otro, mientras usaban el orinalito o el inodoro".
Cuando tengas todo lo que necesitas, será el momento de poner tu plan en acción. Consulta tu diario cada vez que sientas que estás perdiendo el rumbo. Sería lo mismo que consultar de vez en cuando la hoja de ruta cuando escalas esa montaña; ¡y en lo único que tienes que pensar es en esa sensación de logro que tú y tu niño experimentarán cuando lleguen a la cima!
Consejos para diseñar el plan de entrenamiento para tu niño
- Piensa en la manera en la que crías a tu niño. ¿Eres la clase de persona que se maneja con horarios? ¿O te guías más por los tiempos de tu niño? Esto te ayudará a decidir lo que buscas en cuanto al método de aprendizaje para ir al baño.
- Investiga. Busca en internet, revistas y librerías para consultar las ideas y los puntos a favor de cada método diferente. Hablar con otros padres puede ser un excelente recurso.
- Empieza a escribir un diario. Vuelca en él las notas de tu investigación, los puntos más importantes del método de aprendizaje para ir al baño que hayas elegido y los artículos que necesitarás.
- Elige el equipo que necesitarás para llevar a cabo tu plan.
- Elige un fin de semana en el que te quedarás en casa para poder implementar tu plan. ¡Es difícil empezar el aprendizaje para ir al baño cuando estás de viaje!